Vida Sana
Cuando éramos más jóvenes, mantenernos delgados era un objetivo común. Pero a medida que alcanzamos y pasamos los 70 años, debemos reconsiderar la forma en que pensamos sobre el peso.
Es cierto que la obesidad sigue siendo un factor de riesgo importante a cualquier edad, ya que aumenta las probabilidades de padecer hipertensión arterial, diabetes, enfermedades cardíacas, apnea del sueño, trastornos articulares y cáncer. Sin embargo, la forma en que pensamos sobre nuestro peso —y las medidas que tomamos para controlarlo— debe ser un poco más compleja. “Bajar de peso” no siempre es un objetivo acertado.
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“Una vez pasados los 70 años, nos preocupa bajar rápidamente de peso, tener un peso inferior al normal y la sarcopenia —la pérdida de masa muscular propia de la edad—”, señala la Dra. Kristen DeCarlo, una geriatra que ejerce en las áreas de endocrinología, diabetes y metabolismo en UI Health, en Chicago. Si notas que empiezas a adelgazar sin proponértelo, ten en cuenta que esta tendencia a bajar de peso puede indicar una pérdida de masa muscular.
Algunas investigaciones revelan que tener cierto peso de más al envejecer puede, de hecho, ser un factor de protección. Los médicos utilizan la escala del índice de masa corporal (IMC) para calcular la grasa corporal y determinar si tienes un peso inferior al normal, un peso saludable, sobrepeso u obesidad.
En un estudio que se llevó a cabo en el 2022, los investigadores descubrieron que el IMC más saludable para las personas mayores de 65 años es de 31 a 32 en el caso de las mujeres y de 27 a 28 en el de los hombres, es decir, más alto que el recomendado para las personas menores de 65 años.
Esto se conoce como la “paradoja de la obesidad”, y su causa no se conoce con exactitud, explica DeCarlo. Algunos estudios indican que las personas mayores de 60 y 70 años con un IMC más alto presentaron incluso un menor riesgo de demencia que las que tenían un peso normal o inferior al normal, aunque el motivo es tema de debate. Dado que la pérdida de peso es una característica común de la demencia, estar más delgado puede ser simplemente una indicación del comienzo de la enfermedad. Eso no significa que descuidar el peso sea lo correcto. Todo lo contrario: prestar atención a los cambios de peso y de complexión corporal, así como hacer un esfuerzo consciente por conservar la mayor cantidad posible de masa muscular, te puede ayudar a mantenerte dentro de un margen saludable para vivir bien durante muchos años.
5 cosas que le suceden a tu cuerpo después de los 70
No se trata solo de que la balanza se incline hacia el otro lado con el paso de los años. También se producen otros cambios en el físico, señala la Dra. Gitanjali Srivastava, directora médica de Medicina de la Obesidad del Centro Médico de la Universidad Vanderbilt, en Nashville.
1. La pérdida de masa muscular se acelera
“A medida que envejecemos, podemos volvernos más frágiles”, dice Srivastava. “No hacer ningún ejercicio con pesas después de los 50 o 60 años produce una gran pérdida de masa muscular que puede ser más visible ahora”. Al llegar a los 80 o 90 años, la mitad de la masa muscular puede haber desaparecido. Casi la tercera parte de los adultos mayores de 70 años tienen dificultades para caminar, levantarse de una silla o subir escaleras, según el Instituto Nacional sobre el Envejecimiento. Los ejercicios de resistencia, especialmente los que trabajan los grupos musculares más extensos del cuerpo, como los glúteos y los muslos, pueden ser de gran ayuda. Prueba las sentadillas en el aire: ponte de espaldas a una silla resistente, con los pies separados a la altura de los hombros y la espalda recta. Ahora dobla las rodillas y baja los glúteos como si fueras a sentarte en la silla. Pero en cuanto los glúteos toquen el asiento, impúlsate de inmediato hacia arriba utilizando los glúteos y los muslos para volver a la posición de pie. (Haz una serie de 35 repeticiones y aumenta gradualmente hasta lograr hacer cuatro series de 35). Intenta hacer este ejercicio tres días por semana; las investigaciones demuestran que este programa mejora la funcionalidad de la parte inferior del cuerpo en los adultos mayores.
2. Quizá bajes de peso pero también acumules grasa
“En los adultos razonablemente saludables, se produce un aumento natural de la grasa corporal hasta los 80 años”, indica DeCarlo. La pérdida de masa muscular, sumada a los cambios hormonales y los efectos secundarios de los medicamentos, pueden favorecer una mayor acumulación de grasa que en los años de juventud.
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